miércoles, 26 de noviembre de 2008

Conociendo a Rosa

Todas las celdas formaban una especie de ángulo recto alrededor del patio y, lógicamente debido a nuestro primer grado, las celdas eran individuales.
Cuando bajaba al patio y puesto que aún no conocía a nadie, me sentaba en una esquina observando a la gente ir y venir charlando.
Hablaba con otra presa que estaba en su ventana pues tenía la primera fase del primer grado y bajábamos al patio en horas diferentes, se llamaba Rosa y durante mucho tiempo fuimos inseparables hasta el punto de que cuando la pasaron a la 2ª fase que era en la que estaba yo, las funcionarias nos llamaban Rosas para decirnos cualquier cosa.
Como es de suponer desde que la pasaron a mi fase nos gustamos y a los pocos días nos habíamos enrollado. Lo hacíamos todo juntas, comer, pasear, ir al gimnasio de la prisión, al cine, etc.
Cuando teníamos vise à vise lo hacíamos juntas y cuando salíamos a comunicar con nuestras respectivas familias también íbamos juntas así que le presenté a mis hijos sin ocultarles lo que había entre nosotras.
Rosa era maravillosa, la pareja ideal, jamás pensé que podría enamorarme de esa forma de otra mujer.
Mañana más. Besitos a todos/as

No hay comentarios: